Rahue, 19 de octubre de 2024. (mapuchediario.cl)– Este viernes (18.10.2024) en Rahue, se conmemoró la matanza de Forrahue, un criminal hecho historico de despojo y colonización, contra las comunidades Mapuche Williche, pero tambien de ocupación del territorio ancestral de la Futwillimapu por parte del estado chileno y de los colonos, los recién llegados.
Acá hubo horrores, donde participaron jueces, politicos, autoridades estatales, la naciente policía, y los civiles vinculados a colonos.
En octubre de 1912 ocurrió en los territorios de la Futawillimapu una de las mas sangrientas y coloniales matanzas de personas mapuche, incluidos niños. También hubo varias victimas desaparecidas. Testimonios orales de las familas afirman que luego que colonos, tinterillos, políticos y policias arremetieron en las comunidades, mataron a mucha gente. Lo trágico es que a la ciudad luego llevaron a algunas personas. En el camino pasaron a tirar a los rios, a las quebradas varios cadávares de mapuches.
Los dolorosos hechos quedaron grabados en la memoria historica de las familias que fueron directamente victimas, pero tambien ahora de toda la comunidad mapuche willliche.
Este viernes 18 de octubre, 112 años despues, los jóvenes, estudiantes, niños, comunidades y familias participaron en un nuevo año de conmemoración de esta fecha para trabajar y construir un memorial de esta trágica e histórica matanza.
Pero este hecho, planificado de matar a varios y llevar a algunos a la carcel y a tribunaes no fue la única en esos tiempos colonizadores. En la ceremonia de este viernes 18 de octubre d 2024 se leyó una cronología de despojos con resultado muerte y heridos graves en la Futawiilimapu entre 1900 y 1950
Registros de historiadores y la memoria de las familias y comunidades registran matanzas similares en los territorios de Rupanco en 1911, Forrahue 1912, Loncoche 1913, Frutillar 1916, Llanquihue 1916, Lanco 1917, Futrono 1918, Maihue 1923, Curaco 1924.
La zona conocida como Pampa Reyes, en Rahue, donde se ubican centros hospitalarias, ahora debe ser un sitio de memoria. Para eso trabajan los jovenes, las familias, los y las estudiantes, las comunidades y muchas personas mapuche y no mapuche.
